El hálito de los descalzos recorre el país
Si bien el libro se puede adquirir en las principales librerías de las capitales, su promoción ya llega a territorios más remotos. Magangué, población que recibió decenas de descalzos, fue escenario de un sentido encuentro entre pobladores de zonas campesinas de aquella época, activistas que permanecimos por años con ellos y habitantes del casco urbano conocedores y seguidores de la labor de los descalzos.
Por Alberto Herrera
Las narraciones de la febril actividad adelantada por los descalzos, de las dificultades que se les presentaron, las iniciativas que tomaron y los éxitos obtenidos, a lo largo de remotos sitios donde accedieron, recorren el país gracias a la valiosa recopilación de testimonios de más de un centenar de ellos recogidos en el libro “Solo teníamos el día y la noche”. Narraciones desconocidas para el común de la población que al leerlas expresan su asombro por tan decidida y abnegada labor dedicada a los habitantes de los territorios donde llegaron. Las enseñanzas dejadas por los descalzos, su integración con la población campesina y las conquistas alcanzadas, dejaron una huella donde pisaron y mostraron la posibilidad de cambiar ancestrales tradiciones de subyugación.
La publicación se conoció inicialmente en la feria del libro de Bogotá cuando sus autores, Fernando Wills y Leonel Giraldo ante un colmado auditorio como lo reseño La Bagatela # 94, explicaron la importancia de esta gesta y narraron la intensa actividad para recoger los testimonios. Semanas después fue la biblioteca del Gimnasio Moderno el escenario de su presentación ante un numeroso público que incluía protagonistas de la contienda narrada y quienes en viva voz refirieron episodios de su admirable experiencia.
Si bien el libro se puede adquirir en las principales librerías de las capitales, su promoción ya llega a territorios más remotos. Magangué, población que recibió decenas de descalzos, fue escenario de un sentido encuentro entre pobladores de zonas campesinas de aquella época, activistas que permanecimos por años con ellos y habitantes del casco urbano conocedores y seguidores de la labor de los descalzos. Hombres y mujeres, dirigentes del bajo Cauca, de las sabanas de Bolívar, de las estribaciones de la Serranía de San Lucas y de La Mojana recordaron la experiencia vivida, reconocieron sus logros y lamentaron el tempestuoso final de la gesta. Todos se llevaron el libro que hoy leen en tertulias con vecinos.
El libro se publica en época propicia, cuando se desentrañan hechos y eventos desconocidos, cuando afloran capacidades y saberes antes ocultos, cuando hay un interés por el rescate del país y el bienestar de la gente, cuando por primera vez existe la posibilidad de un cambio. La experiencia de los descalzos se suma a este nuevo espíritu, contribuye a superar los lastres del pasado, a dejar la violencia, unir las mayorías y encontrar la senda del progreso y la prosperidad. Se presenta el mejor momento para la segunda descalzada, la definitiva, se dan las condiciones para llegar hasta el último habitante en cada región, darle la mano y vincularlo a esta oleada de trasformación que sacude a Colombia.
PD. Nuevas presentaciones del libro se harán en Santa Marta, Barranquilla y Cartagena del 16 al 19 de agosto y a finales de mes el Fondo de Cultura lo hará en sus librerías de Bogotá. La Bagatela informará sobre estos eventos