Declaración del PTC. Rechazamos la agresión imperialista y respaldamos al presidente Petro

Hace una semana durante su posesión, Trump nos ponía en alerta con sus anuncios en diversos asuntos de política nacional e internacional. Como era previsible, de inmediato procedió a firmar numerosas órdenes ejecutivas para llevarlos a la práctica.

En lo que respecta a su política frente a la migración, ordenó a gobernadores y gobernadoras adelantar redadas, con el fin de detener a todos los inmigrantes, hombres y mujeres, que no tuvieran sus papeles en regla. Frente a esta orden, enfrenta la resistencia de varios de los Estados demócratas, así como numerosas demandas jurídicas. Pero se inició lo que su gobierno llamó la deportación masiva más grande de la historia de su país.

En su discurso racista, xenófobo, misógino, homofóbico y fascista, propio de la ultraderecha que lidera, Trump caracteriza a los migrantes como criminales, que atentan contra la seguridad de su país. Durante el fin de semana, los primeros aviones militares con cientos de personas deportadas, en condiciones degradantes, fueron enviados a varios países de la región, incluida Colombia.

El presidente Gustavo Petro no permitió el aterrizaje en Bogotá de dos aviones, dejando en claro que rechazaba el trato indigno y degradante que se daba a las personas deportadas, consideradas por ese gobierno como criminales.

De inmediato, Trump montó en cólera y, como cualquier emperador airado, tomó medidas contra el país entero. Anunció el cierre de la oficina para otorgar visas en nuestro país, la cancelación de la visa al Presidente y a los funcionarios de su gobierno, a su familia, así como a sus partidarios.

En lo económico, anunció la imposición de aranceles elevados a los productos de exportación, inicialmente del 25%, pero en unos días del 50%. Sin duda, una medida nefasta para la economía colombiana, que, en medio de muchas dificultades, procedentes del entorno internacional y de una feroz oposición interna, viene en franco proceso de recuperación.

El presidente Petro respondió con una comunicación memorable, en la que defiende la dignidad de los pueblos y acusa al jefe de la Casa Blanca, entre otras cosas, de fascista y esclavista. Al mismo tiempo, anunció también medidas comerciales en contra de EEUU y la búsqueda de nuevos socios comerciales en otras regiones del mundo.

Sin embargo, horas después de que estallara la crisis, se produjo una “normalización” en las relaciones diplomáticas. Aunque Washington señaló que el presidente colombiano había echado para atrás su postura y aceptado todas las condiciones, lo cierto es que Gustavo Petro consiguió el objetivo propuesto: el retorno de inmigrantes irregulares se realizará en condiciones dignas. Todo un logro en medio de una situación tan difícil para Colombia.

Desde el inicio de la crisis, la postura valiente y enhiesta del mandatario colombiano despertó el respaldo en los países de América Latina y el Caribe, en particular de los gobiernos alternativos. Los presidentes de la región fueron convocados a una reunión de emergencia de la CELAC en Honduras este jueves, con el fin de adoptar decisiones conjuntas frente al tema.

Como podía esperarse, en Colombia la oposición de derecha y sus medios utilizaron esta crisis para cuestionar de nuevo al gobierno, encontrando en este enfrentamiento un nuevo argumento para tratar de impedir por todos los medios que el presidente Petro termine exitosamente su mandato, y sobre todo, que en el país continúe su proyecto transformador.

El PTC respalda la postura valiente de nuestro presidente, en defensa de la soberanía y la dignidad nacionales, y llama a todas las organizaciones políticas, sociales y sindicales a reforzar la movilización social en defensa del primer gobierno progresista de Colombia.

Sin duda, la lucha contra el fascismo y el imperialismo les compete a todos los pueblos y sectores democráticos y progresistas de la región y del mundo entero.

PARTIDO DEL TRABAJO DE COLOMBIA 
Comité Ejecutivo Central