Federico Gutiérrez: ¿alcalde de Medellín o figura política de la oposición?

Fico y Vicky
Edición #99
Septiembre 2024

En este artículo se analizan los primeros meses de gobierno de Gutiérrez en Medellín, señalando su cercanía con el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA) y el manejo arbitrario de recursos públicos. Se destaca que su administración enfrenta los mismos problemas de su mandato anterior, como el aumento de la extorsión y la corrupción en contratos. Además, Gutiérrez ha utilizado su confrontación con Gustavo Petro para posicionarse políticamente, apoyado por los medios de comunicación. El texto concluye que Medellín ha sido convertida en un bastión electoral más que en una ciudad para gobernar.

Por Juan Orlando Bonilla

Historiador y docente.
Bonilla

El primer encuentro del foro “Semana por Colombia”, llevado a cabo este 28 de agosto, puede servir fuera de toda ironía, como un resumen preciso de estos primeros 8 meses de gobierno de Federico Gutiérrez en la ciudad.
Como en el nuevo gobierno de Fico, el Grupo Empresarial Antioqueño se hizo presente de lleno en todos los aspectos del evento:

  • De entrada, se realizó en la Universidad EAFIT, pese a que la rectora de esta afirmó sólo haber prestado el espacio, es innegable la relación que esta universidad mantiene con el GEA desde su fundación.
  • Contó con la presencia de EPM, en cuya junta directiva Fico ha incluido a personajes directamente relacionados con el GEA como Gabriel Ricardo Maya, Elena Rico Villegas, Luis Fernando Álvarez y Luis Fernando Rico.
  • Además de la presencia directa de varias empresas de este grupo como patrocinadores del evento.

El manejo arbitrario de los recursos públicos no podía faltar; por eso, entre otros, el evento contó también con la presencia de Comfama, en cuya junta directiva hubo donantes a la campaña presidencial de Iván Duque, como Juan Rafael Arango Pava. Y por supuesto, cosa que causó escándalo, el evento estuvo financiado por la Gobernación de Antioquia y la Alcaldía de Medellín; esta última siguiendo con su preocupante costumbre de asignar dineros públicos sin licitación previa, como se ha comprobado en el escándalo de los más de 7mil millones de pesos diarios entregados a dedo por Fico en sus primeros 7 meses de gobierno.

Aunque se vende a “Semana por Colombia” como un foro académico y periodístico, es considerado abiertamente por sus asistentes como el acto de inauguración de la campaña de Vicky Dávila a la presidencia en vistas a 2026; por supuesto, contando con la presencia de sus virtuales aliados políticos y posibles financiadores. La periodista invitó a Fico a “resistir”, dejando el sabor de que su campaña presidencial debía iniciar en la ciudad y el departamento que son considerados el fortín político de la oposición al gobierno Petro.

La Medellín de Fico…

Es vox populi la idea de que la gente votó a Quintero porque Fico había sido un mal alcalde, y volvió a votar a Fico debido a la pésima administración de Daniel Quintero, pero como un dejavú la ciudad enfrenta los mismos problemas que tuvo en la primera administración de Gutiérrez:

  • Los 1.4 billones de pesos otorgados a dedo en los primeros 7 meses de la administración recuerdan los gastos extravagantes del primer gobierno de Fico, como el helicóptero en el que el alcalde jugaba a ser Batman.
  •  Extrañamente la ciudad vuelve a atravesar por la misma reducción de los crímenes violentos con excepción de la extorsión, que extrañamente vuelve a aumentar en el nuevo gobierno de Fico, recordándonos aquellos tiempos en que el pacto entre la administración y las bandas criminales permitía a estas últimas extorsionar a los ciudadanos impunemente, mientras redujeran los robos y homicidios.
  • De nuevo el turismo sexual o y narco-turismo se vuelven tendencia en la ciudad, sin que el alcalde actúe en absoluto frente a ellos.
  • Y nuevamente sorprenden a la opinión pública los millonarios contratos y favores políticos que hace la administración a los medios de comunicación locales.

Pero la ciudad también afronta nuevos retos, algunos heredados de la alcaldía de Quintero, otros surgidos de la actitud arrogante del actual alcalde.

  • La gentrificación urbana, de la mano de un aumento exorbitante en los arriendos y el acelerado cambio en el uso de la tierra está siendo un factor importante de desplazamiento de la población.
  • La alcaldía no ha podido responder ante el manejo del problema de las basuras, viéndose la ciudad inundada de estas por sectores.
  • Y el colapso evidente del sistema de transporte público y de la malla vial de la ciudad.

Ante las nuevas y viejas situaciones la respuesta del alcalde ha sido formula: Acusaciones a sus opositores, como aquella afirmación de los concejales de Fico acusando a Quintero de pagar a personas para ensuciar la ciudad; y volver cada problema un escenario de confrontación con Gustavo Petro.

Y en medio de esas acusaciones y confrontación surge recientemente la venta arbitraria del patrimonio público representado en UNE-EPM, utilizando como justificación aquella excusa que se le da a los colombianos cuando se busca rematar las empresas del estado: “ya no era rentable”.

En todas las situaciones, en los problemas, ataques y peleas, Fico ha contado con el apoyo incondicional de los medios de comunicación hegemónicos. Apoyo que explica la realización del lanzamiento de la campaña de Vicky Dávila en la ciudad de Medellín.

¿El “cuarto poder” al poder?

La frase de Jim Morrison, “Quien controla los medios, controla la mente”, cobra mucho sentido en las actuales circunstancias políticas del país. Si bien las reformas sociales del gobierno van encaminadas el empoderamiento de los ciudadanos y la recuperación de los derechos de la población colombiana, han tocado los intereses de los grandes grupos económicos, quienes más provecho habían sacado del recorte progresivo de los derechos a la población. No es secreto para nadie que en Colombia los grandes grupos económicos son los dueños de los medios de comunicación masiva, y del mismo modo que estos medios estigmatizaron (y estigmatizan) el movimiento social de 2021, atacan abiertamente al gobierno Petro como forma de defender sus intereses frente a las pocas conquistas sociales que va logrando la población.

La defensa de la labor de Fico, y el apoyo directo de este a Vicky Dávila, se vuelve una parte importante de esa estrategia reaccionaria, y Medellín sufre entonces el destino de ser un fortín electoral, más que una ciudad para gobernar. ¿Cómo puede hacer control político la población sobre los billonarios contratos entregados a dedo, o sobre los vasos de leche comprados a 7 mil pesos si los medios se encargan de enmascarar todos los escándalos de la actual alcaldía? ¿Cómo influirán en la entrante campaña electoral las fotos de Vicky Dávila en su evento de apertura de campaña junto al alcalde que, contra toda evidencia, es mostrado en los medios como un ejemplo de buen gobierno?

El problema está planteado, y en ningún caso se trata de que la prensa libre sea un peligro para las conquistas sociales de la población. Ahora se hace explicito que la utilización de los medios de comunicación como herramienta política por parte de grupos económicos, disfrazada de libertad de prensa, va a ser un factor fundamental en el futuro político del país.

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