La Hoja 38
¡Cerrar filas alrededor del gobierno y sus reformas!
Por Yezid García Abello. El pulso político de la poderosa coalición de fuerzas de la ultraderecha, conformada por la mayoría de los gremios económicos, grandes medios de comunicación, organismos de control como la Fiscalía y la Procuraduría, militares retirados y los partidos de oposición contra el gobierno del presidente Petro, respaldado por los sectores democráticos, los partidos de gobierno y la amplísima mayoría de los sectores populares, ha llegado a su nivel más alto de confrontación en la semana que hoy finaliza.
No ha habido procedimiento irregular que esa ultraderecha no haya utilizado, no ha habido calumnias y mentiras desterradas del debate, los medios machacan 24 horas de cada día de la semanas sobre la "tragedia que va a sobrevenir por culpa del gobierno", todo en el vano intento de aislar a Petro de los colombianos.
Pero el presidente se defiende con la legitimidad de su elección, el ambiente favorable en el medio internacional, su profundo conocimiento del país, la justicia de las reformas y cambios sustanciales que ha propuesto, la lucha por la verdad, la movilización popular en las calles y plazas, su valor y entereza de carácter.
La ultraderecha desarrolla su libreto de golpe de estado, duro o blando, dice como buena demagoga que las reformas son necesarias pero que no toquen ninguno de sus desproporcionados privilegios, se niega a reconocer que la intransigencia en el trámite de las reformas puede conducir a un levantamiento incontrolable y un nuevo estallido social con todas sus impredecibles consecuencias.
@petrogustavo llama a la sensatez, insiste en el acuerdo nacional que tratan de boicotear los sectores más atrasados, ha estado dispuesto a negociar para que los cambios surtan trámites; pero hasta hoy, la respuesta en el otro bando es atizar la hoguera de manera irresponsable.
Es hora de cerrar filas, pero de verdad verdad, con el gobierno del presidente Petro. Se debe respaldar la propuesta y los esfuerzos del gobierno por lograr un acuerdo nacional. No es el momento de críticas secundarias sobre la velocidad de los cambios, la puntualidad del presidente o el tono de sus brillantes intervenciones. Que se aproveche por candidatos y activistas la campaña electoral para defender las reformas del gobierno y esclarecer a las mayorías lo que está en juego en esta confrontación.
El PTC ha puesto, y pondrá hacia adelante, su grano de arena en este propósito. Como nunca antes: ¡unidad, unidad, unidad! 7 de octubre de 2023.
Intervención del Presidente Gustavo Petro en el cto de disculpas públicas a las familias de 19 víctimas de ejecuciones extrajudiciales cometidas por el Ejército Nacional.
De las redes de Marcelo Torres
Tiene razón el presidente Petro: la intransigencia de la plutocracia gobernante empuja cada vez más a Colombia al dilema de más violencia, más vidas y riqueza perdidas, o un choque popular social y político sin antecedentes de pueblo contra oligarquía neoliberal y progringa.
Después de ganar la presidencia Petro propuso y logró un gran acuerdo nacional; sin embargo, lo rompió la casta oligárquica. Ahora Petro persiste en reanudarlo, para negociar las reformas, pero la plutocracia arrecia los ataques, ¿no creen que los de arriba juegan con candela?
Lo cierto es que hoy Colombia está abocada a transitar el rumbo de transformaciones progresivas negociadas con los dómines de siempre, el que propone Petro; o a precipitarse a un conflicto más violento y más sangriento, el de la oligarquía.
Campaña electoral en Cundinamarca
Ivonnet Tapia, cabeza de lista de asamblea
Intenso recorrido por el departamento ha permitido acercar las fuerzas del Pacto Histórico alrededor de la lista a la asamblea departamental. Ivonnet quien la encabeza, se reúne y escucha atenta a los habitantes en cada lugar donde llega. En sus propuestas señala la importancia de tecnificar las labores agrícolas, de facilitar la comercialización de sus productos, de promover el turismo sostenible, y proteger el agua, la vida y la naturaleza. En su recorrido ha llegado a las provincias del Guavio, Tequendama y de Sumapaz, a los municipios de Fusagasugá, Arbeláez y Pandi. También estuvo en Apulo, Anapoima y Viotá.
Concejo Pacto Histórico
Mosquera: Harry Salamanca cabeza de lista, Yeimy Guerrero, Diego Escandón.
Fusagasugá: Rubiela Cuarán
Cota: Anyela Hernández, Julio César Espejo
Facatativá: Fernando Chávez, Lina María Vanegas, Jesús Quintero
Concejo PTC
Sasaima: Isidro Prieto
Fosca: Claudia Patricia Hernández, Jorge Sanabria.
Elecciones en Bogotá
Unidad política y electoral del Pacto Histórico
Bogotá se ha convertido en un bastión del pensamiento independiente y democrático. En la capital han gobernado, a partir del año 2004, varios alcaldes alternativos incluido Gustavo Petro, hoy presidente de la República, quien lo hizo a nombre de diferentes fuerzas progresistas hoy trasmutadas en Pacto Histórico.
Bogotá es una ciudad compleja donde, sin lugar a dudas se concentran los principales problemas del país empezando por la pobreza y la desigualdad, a los que se unen la seguridad, la movilidad, la salubridad, el desempleo, la informalidad, la vivienda, la educación, el deterioro ambiental, la exclusión social y varias decenas de reclamaciones de las barriadas y sectores poblacionales que cohabitan en la metrópoli.
Por estos dos contextos para el Pacto Histórico enfrentar con disposición de éxito las elecciones para alcaldía, concejo y juntas administradoras locales es un desafío fundamental.
La primera dificultad que se tuvo que sortear fue la de tener candidato a la alcaldía y listas a concejo y jal del Pacto Histórico que fueran acogidas por 12 partidos políticos que ostentan personería jurídica y otras tantas agrupaciones de carácter distrital y local. El nombre del exsenador Gustavo Bolívar, mediante un mecanismo de encuesta, fue acogido por unanimidad. Hoy Bolívar es serio aspirante a ser el próximo acalde de Bogotá.
Por la complejidad visiones e impedimentos de las normas electorales las listas al concejo y las juntas administradoras locales no se pudieron acordar unánimemente, sin embargo su construcción concluyó con una aceptación altamente mayoritaria, lo que determinó que haya listas cerradas (se vota por el logo del Pacto Histórico) y cremalleras (mujer hombre), cumpliendo con los criterios de servir al pueblo, primacía del interés general y equidad de género, propalados en los postulados políticos del Pacto Histórico.
Estas elecciones territoriales se llevan a cabo por primera vez en la historia de Colombia bajo un gobierno de izquierda que encabeza Gustavo Petro del Pacto Histórico. El hecho de que este gobierno, revirtiendo la pirámide de poder, este gobernando para la mayoría de la población de trabajadores, campesinos y desposeídos, proponiendo reformas de cambio para garantizar mejores ingresos, tierra, trabajo, salud y educación; porfiando por el desarrollo de una economía popular, enarbolando la paz y la convivencia frente a la guerra y la muerte, protegiendo al país contra el cambio climático que provoca el uso desmedido de combustibles fósiles y transformando la cultura de la codicia de enriquecimiento individual por la ganancia social, ha provocado una envestida sin antecedentes orquestada desde las altas élites del poder económico y político que se traduce en una campaña de los grandes medios de comunicación, la oposición política y legislativa y entidades del Estado en manos de la derecha para impedir el desarrollo del buen gobierno, la aprobación de las reformas del cambio y el bienestar popular.
Esta es la segunda dificultad que enfrenta la campaña del Pacto Histórico en Bogotá. Para enfrentarla se cuenta con un excelente candidato a la alcaldía, honesto como el que más, leal a los principios y al gobierno del Pacto Histórico, interesado profundamente en la solución de los problemas de la capital y dedicado a la tereas de campaña. Además, con 35 candidatos y candidatas al concejo, entregados día y noche, sin importar su posición en la lista, a llevar las propuestas por toda la ciudad, con el plan manzana, la pedagogía electoral, reuniones barriales y sectoriales y la repartición de más de un millón de periódicos, reforzando la proyección de la campaña en la opinión publica. Se suma a este ejercicio más de 250 candidatos y candidatas a las juntas administradoras locales de las 20 localidades distritales, ellos juegan un papel primordial, son el cordón umbilical que une el Pacto Histórico con los habitantes de las barriadas populares bogotanas, son la concreción en los territorios de las políticas progresistas que defendemos, son los líderes y lideresas reales de este gran entramado político por la reivindicación popular. Adicional a estos grandes ejes se debe agregar la labor anónima pero masiva de los varios miles de militantes y activistas hombres y mujeres de los partidos que constituyen el Pacto Histórico, su labor permanente, abnegada, convencida y tenaz contribuye de manera gigante a la construcción del triunfo electoral en Bogotá.
El papel del Partido del Trabajo de Colombia
El PTC en este cuadro de la campaña del Pacto Histórico en Bogotá ha fungido sin vacilación y a fondo el rol que le corresponde como partido de los trabajadores. Ha sido insistente en la preservación de la unidad y en la defensa del gobierno del cambio como elementos principales en esta campaña en la capital de la república. Ha aportado en la elaboración y difusión de su programa y en la promoción y movilización de sus portavoces empezando por su principal figura Gustavo Bolívar. El PTC, además de estar jugado a fondo con todos sus integrantes, ha aportado sus mejores hombres y mujeres como candidatos al concejo y a las jal, entre ellos y ellas un destacamento importante de jóvenes militantes de su organización juvenil la Juventud Patriótica. Veamos su sinopsis:
Candidatos del PTC al Concejo en lista cerrada y cremallera
Candidatos del PTC a las JAL en lista cerrada y cremallera
Presencia electoral del PTC en el Huila
El Partido del Trabajo de Colombia –PTC – del Huila arrancó con una modesta campaña electoral con candidatos al Concejo en Neiva con el número 13, Hobo números del 1 al 7, a las Alcaldías de Hobo con Julie Pauline Suarez y Gigante William Hernando Calderón (donde por no llegar el acuerdo de coalición de los partidos nos dejaron sin inscripción de nuestros candidatos al Concejo) y, para la asamblea departamental con Luis Edgar Gutiérrez G. encabezando la lista del Pacto Histórico con el número 51 y con voto preferente.
En la campaña “Juntanza por el Huila” e la asamblea se ha recorrido todo el Departamento y se ha venido abriendo paso una corriente bien importante en el Sur, Centro y Neiva especialmente en los sectores de trabajadores, maestros, campesinos y pensionados.
En próxima edición espere la crónica electoral de los candidatos del PTC en el Pacto Histórico y los que apoyamos en en Valle de Cauca, Antioquia y otros regionales
Video institucional del PTC
Video institucional que se transmitió en los canales regionales y locales y en Señal Colombia sobre qué es y qué se propone el Partido del Trabajo de Colombia PTC en la actual coyuntura política por las que atraviesa la nación.
In memoriam
Partió Alberto Pineda, pero siempre lo llevaremos en nuestros corazones
Por Marcelo Torres Benavides. Alberto Pineda, destacado integrante de la Vieja Guardia del PTC, miembro de su Comité Central, Secretario Regional del partido en el Quindío, profesor universitario, falleció el pasado sábado 30 de septiembre de 2023 en la ciudad de Armenia.
Fue nuestro camarada Alberto un sobresaliente dirigente estudiantil que se hizo conocido personaje en el campus desde su época de estudiante en la Facultad de Economía de la Universidad Nacional de Colombia, vinculado a las filas del ala juvenil del PTC, la Juventud Patriótica. “Jupermán”, le denominábamos cariñosamente por su despliegue de gran energía en las actividades y su atlética complexión, con el humor festivo de aquellos tiempos de clamoroso avance en las luchas de masas. En un memorable episodio en la Ciudad Blanca se batió en defensa de compañeras y miembros de nuestra dirección juvenil deplorablemente agredidos por algunos sectores, por nuestra decisión de participar en elecciones que por aquel entonces, a diferencia de hoy, era blanco de pueril descalificación por la mayoría de agrupaciones de izquierda.
Comenzado en firme el período neoliberal en Colombia, en la pugna que se desató dentro de la fuerza política fundada por Francisco Mosquera, Alberto Pineda tomó partido por la corriente que esgrimía como guía estratégica del partido las tesis propaladas por el fundador y líder del PTC, a saber: la política de frente único para transformar a Colombia, la vinculación al movimiento obrero y a todas las luchas populares, la solución progresiva del problema agrario, la industrialización, la reconquista de la independencia nacional y la democracia para el pueblo.
Vinculado más tarde como docente de la Universidad del Quindío, su aporte como secretario regional del Quindío a la construcción del PTC en la región cafetera fue fecundo y perdurable. Al lado de maestros, trabajadores y gentes del pueblo, siempre participó activamente en la orientación y vocería de sus luchas.
En 2013, realizó una generosa donación de miles de sus propios libros a la biblioteca pública del municipio de Magangué.
Hoy, ante la luctuosa noticia de su fallecimiento, expresamos nuestro saludo y fraterna solidaridad, nuestras profundas condolencias a su esposa y a sus familiares y allegados.
Ante Alberto Pineda, infatigable luchador de toda la vida por las causas justas de Colombia y el mundo, inclinamos con dolor y admiración nuestras banderas. Honor y gloria a su querida memoria.
Bogotá, 2 de octubre de 2023
Al que le caiga el guante que se lo chante
Asombrado, entristecido, avergonzado, el país escuchó la audiencia en Yopal, Casanare, convocada por la JEP para que frente a los familiares de las víctimas, 21 militares, incluyendo al general en retiro Henry Torres Escalante, rindieran testimonio de su responsabilidad y autoría de 164 asesinatos de los llamados “falsos positivos”, o mejor ejecuciones extrajudiciales, en la jurisdicción de la Brigada XVI del Ejército Nacional en Casanare.
En esa audiencia pública los relatos fueron desgarradores y se manifestó una evidente actitud de los militares acusados de reconocer sus crímenes y pedir perdón al país y a los familiares de las víctimas, campesinos y jóvenes, apresados o engañados por ofertas ficticias de trabajo, para llevarlos a terrenos apartados y fusilarlos. De tal gravedad fueron las acusaciones y los reconocimientos de culpabilidad que el general (r) Torres dijo que se había convertido “en el líder de una organización criminal”. Se cumplía así el objetivo de la Jurisdicción Especial de Paz de esclarecer los crímenes, reconocer responsabilidades, pedir perdón a los familiares de los asesinados, buscar la reparación, garantizar la no repetición y contribuir a la reconciliación de los colombianos.
Cuando se indagó por las razones que propiciaron estos vergonzosos crímenes, los militares unánimemente señalaron que había influido determinantemente la presión por resultados ejercida desde la más alta cúpula militar, a la tesis de “privilegiar las bajas frente a las capturas”, a ofrecer dádivas, premios, ascensos y licencias a las escuadras que más víctimas reportaran. Tanto que se mencionó con nombre propio al general (r) Mario Montoya, comandante del Ejército Nacional en esa época.
Lo que no esperaba la opinión pública era que frente a estos hechos emergiera energúmeno el expresidente Álvaro Uribe Vélez lanza en ristre contra la JEP y anunciara la continuidad de su batalla política y legal por destruirla. En un video publicado en sus redes el 20 de septiembre afirmó, óigase bien, que fue él quien enfrentó, denunció y castigó a los militares inmersos en los “falsos positivos”; que él no reconoce a la JEP porque “fue impuesta por las FARC, Venezuela y Cuba”; que en su gobierno se disminuyeron los homicidios y se fortaleció la lucha contra el narcotráfico y las guerrillas; que la JEP estimula a reconocer delitos no cometidos y que presenta como inocentes a gente que estaba delinquiendo.
Estas delirantes declaraciones motivaron el repudio de la opinión democrática en Colombia y la comunidad internacional, y la aparición de decenas de artículos periodísticos, entre ellos el editorial del diario El espectador del domingo 24 de septiembre y una columna sesuda de Rodrigo Uprimny sobre las responsabilidades del expresidente en el tema.
El editorial, con sólida argumentación, se asombra de que Uribe en lugar de bajar la cabeza con respeto y contrición, escogió insistir en negar la barbarie y el sufrimiento de decenas de miles de colombianos, y en cambio, continuar los irracionales ataques contra la JEP. Esta jurisdicción, recuerda el editorialista, ha recibido el respaldo de la Corte Penal Internacional, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y decenas de centros de pensamiento democrático.
Uprimny en su columna sostiene con razón que, si bien es cierto que aún no se ha presentado una prueba de que Uribe dio la orden directa de los 6402 crímenes, el expresidente debe responder por lo que se conoce como responsabilidad de mando, dado que cumple las condiciones del derecho internacional para ser inculpado: acatado jefe y comandante supremo de las Fuerzas Armadas, control de los altos mandos, información veraz proveniente de la Oficina de la Alta Comisionada para la Paz de la ONU en 2004 de que los crímenes ocurrían desde 2003 y ausencia, hasta 2008, de medidas para impedir la continuidad de los hechos.
De que el expresidente necesita ayuda profesional y ya no bastan las gotas de valeriana lo demuestra la reacción que tuvo frente a estas críticas. Acusar mentirosamente a Rodrigo Uprimny, a través de su asesor jurídico Jaime Granados, de ser “abogado de las FARC, del expresidente Santos y contratista de la Comisión de la Verdad”, demuestra que Uribe está incontrolable; pero además, decir sin siquiera ruborizarse que Uprimny “es uno de los responsables morales y políticos del terrorismo en Colombia” es un exabrupto, una falta de respeto, una limitación mayor a la libertad de prensa y de opinión, y lo más grave, una evidente amenaza contra su vida e integridad.
Septiembre 25 de 2023.
Lo que no les cuesta lo hacen fiesta
Hoy se conoció que el ministerio de Salud, a través de su director jurídico Rodolfo Enrique Salas, radicó ante la Fiscalía General de la Nación una denuncia contra el exministro de Salud del gobierno de Iván Duque, militante de Cambio Radical, Fernando Ruiz y otros altos funcionarios del ministerio. La denuncia por peculado por apropiación a favor de terceros, contratos sin el cumplimiento de requisitos legales y prevaricato por omisión se refiere a un contrato para la compra de los medicamentos Artemeter y Lumenfantrina utilizados en el tratamiento contra la malaria. Esta denuncia tiene el respaldo del ministro de Salud Guillermo Alfonso Jaramillo y Andrés Idárraga Franco, secretario de Transparencia de la Presidencia de la República. Los hechos ocurrieron a partir del 5 de marzo de 2021 cuando el exministro Ruiz definió en un documento las cantidades de medicamentos que se debían adquirir para tratar enfermedades transmitidas por vectores, entre ellas, la malaria. Las reservas adquiridas debían cubrir las necesidades del 2021 y el primer semestre de 2022. Los estudios y proyecciones indicaban que se debían haber comprado 105.000 unidades de esos medicamentos; sin embargo, se compraron más de 2,0 millones. El valor de compra fue de 8.999 millones de pesos por 2.145.000 unidades. La adquisición fue tan exagerada que a la fecha hay 1.927.121 dosis sobrantes almacenadas en las bodegas del ministerio. Como no hay demanda de pacientes para usar semejante cantidad de medicamentos en Colombia, antes de su vencimiento, se estudia la posibilidad de donarlos a países de Asia, como Pakistán. Una denuncia más contra exministros y exfuncionarios del gobierno de Duque por corrupción. Una denuncia más contra militantes de Cambio Radical, el partido que acumula más denuncias ante la Justicia. Sin embargo, Vargas Lleras sobre esto sí no dice nada y trata de pasar de agache. Las bodegas de la ultraderecha han optado por descalificar las denuncias y tratar de convertir a los denunciantes en corruptos y a los que delinquen en "padres de la Patria".
Septiembre 29 de 2023
Las críticas de la ultraderecha, la Revista Semana y la bancada del Centro Democrático encabezada por la senadora Cabal, al nombramiento de Gareth Sella como viceministro de la Juventud en el nuevo Ministerio de la Igualdad, están llenas de odio visceral contra la juventud colombiana y recurren sin pudor a mentiras y calumnias de la peor laya.
Gareth Sella fue herido en medio de la represión policial a una legítima manifestación de protesta que recorría el centro de Bogotá el 24 de febrero de 2021. Tres balas de goma, disparadas a mansalva, impactaron su rostro y lesionaron gravemente su visión, como lo registró la prensa de esas fechas. En su convalecencia sufrió la amenaza y el acoso permanente de enviados por agentes de seguridad que lo obligaron a exiliarse por un período en México.
Gareth no tiene ningún proceso penal en su contra, ni siquiera fue detenido en el estallido social de 2021. Ha sido elegido representante en varios organismos de representación juvenil en Bogotá. Tiene título profesional en cine y televisión y cumple con todos los requisitos legales para ocupar el puesto al que fue nombrado por el gobierno nacional.
Que su nombramiento envía un mensaje a la caverna reaccionaria que desprecia la juventud colombiana, es complemente cierto. Es un nombramiento simbólico que le dice a la juventud que su futuro no está en las drogas ni en la delincuencia, su futuro está en aportar con su empuje y su conocimiento a la transformación de la sociedad colombiana.
Nos unimos a todas la personalidades y fuerzas progresistas que se han pronunciado positivamente frente a esta designación. Como escribió Danna Vargas, la representante por Bogotá al Consejo Nacional de la Juventud en su carta de felicitación a Gareth: "Cuando más nos quieren apagar, podemos brillar con mucha más luz".
19 de septiembe de 2023
Masiva movilización
¿A los empresarios les interesa un acuerdo nacional?
Por Alberto Herrera. La movilización nacional del 27 de septiembre confirmó el gran apoyo popular al gobierno de Gustavo Petro en todos los rincones del país. Las calles en las capitales se vieron colmadas de miles de alegres seguidores del cambio, así como en cientos de municipios se escuchó el respaldo a las reformas que cursan el Parlamento. Se pide su trámite y aprobación.
La jornada mostró una exitosa coordinación entre las centrales obreras, las confederaciones de pensionados, organizaciones campesinas e indígenas, partidos y parlamentarios afines al cambio y el propio gobierno. Fue la expresión pública más exitosa en respaldo a un gobierno en los últimos años. El fervor mostrado en las calles de Colombia dilapidó todo intento de desconocer la legitimidad del gobierno y del presidente.
Los medios tradicionales en su escueta información de la movilización, aunque no pudieron ocultar la importancia de la jornada, trataron de desvirtuarla cuestionando la participación del gobierno en la jornada, cuando por el contrario es novedoso y positivo que el gobierno participe en la movilización, es una forma de comunicarse, de estar en contacto con la población, de difundir sus propuestas, de orientar a sus seguidores. Es un estilo de gobernar distinto en Colombia, sin antecedente reciente. Un presidente con arraigo popular puede y se atreve a movilizar a la población, la movilización masiva denota simpatía y fuerza, Petro las tiene.
La propuesta de acuerdo nacional ocupó parte principal de la intervención de Petro quien señaló que era para generar justicia social en Colombia, “el acuerdo es la base de la paz” y eligió tres temas para su concreción: verdad, tierras y educación. La verdad es la que permite reconciliarnos, permite acordar y no repetir las barbaridades del pasado. “Nuestra estrategia es verdad y movilización”. Sobre la tierra dijo que está concentrada en pocas manos mientras millones de campesinos no tienen donde sembrar, “hagamos que la tierra produzca alimentos”. Por último señaló: “Necesitamos garantizar educación de toda la sociedad que es el instrumento para resolver en parte la desigualdad, para ello necesitamos hacer un mayor esfuerzo financiero”.
A pesar de la enconada disputa política en Colombia, la jornada del 27 se desarrolló en absoluta calma. Ahora la población sale a manifestarse sin el acoso ni la presión de los gases y las armas del antiguo Esmad. Tanto la oposición como los seguidores del gobierno han contado con todas las garantías para expresarse en la calle. Situación contraria al trato dado por el gobierno de Duque al estallido social del 2021 cuando se disparaba a los ojos de los jóvenes, cuando deambulaban por las calles civiles armados y cuando asesinaron a más de 100 ciudadanos que protestaban. El cambio se nota.
El PTC en Bolívar capacita su militancia
En el proceso de organización del Partido del Trabajo de Colombia que incluye la vinculación de nuevos militantes y su formación ideológica, el regional de Bolívar realizó en septiembre un seminario con más de 40 nuevos militantes. Participaron trabajadores de distintas ramas de la producción, maestros, así como un grupo de campesinos venidos de Turbana y Turbaco municipios vecinos de Cartagena. Los jóvenes también se integraron al encuentro.
El seminario lo organizó una comisión dirigida por la compañera Lilibeth Rojas. Las charlas dadas por los dirigentes del Partido Delys Puerta, José Barrios y Manuel Salinas ilustraron sobre el programa y los estatutos del PTC, así como se orientó sobre la actualidad política nacional, las bondades de las reformas del gobierno del cambio y la participación en la jornada del 27 de septiembre.
El seminario marcó el inicio de un proceso de capacitación con buena asistencia y participación de compañeros interesados en capacitarse en temas políticos y contribuir al cambio que avanza en Colombia. Se programó para después de las elecciones del 29 de octubre una segunda jornada de aprendizaje y formación.