La Hoja 18
Las recriminaciones de Blinken a Duque
Por Consuelo Ahumada. Concluyó una visita de dos días a Colombia por parte del secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, la primera de un funcionario de alto nivel de la administración Biden al país.
El contexto en el que esta se produce fue bastante particular. Durante el último año Duque no ha escatimado esfuerzos por ratificarle al nuevo mandatario que la lealtad de su gobierno con Washington es incondicional. Pero por más esfuerzos que ha hecho, incluidos algunos viajes intempestivos, no ha podido reunirse con el mandatario estadounidense. Ni siquiera ha logrado una conversación telefónica.
La razón que explica esta dificultad es más que conocida. Desafiando cualquier consideración diplomática básica, algunos funcionarios de primer nivel del gobierno colombiano, junto con miembros destacados del Centro Democrático, incluido el dueño del Ubérrimo, emprendieron una intensa campaña electoral a favor de la reelección de Trump el año pasado. Como señalan algunos demócratas destacados, esto le costó a su partido la pérdida de algunas curules y es claro que Joe Biden no lo perdona.
Estas reticencias del mandatario estadounidense reflejan contradicciones que, aunque no ponen en entredicho las políticas de fondo del imperio, tampoco se pueden minimizar. Pero es claro que Estados Unidos tiene intereses de primer orden en su relación con Colombia y hay asuntos que pesan bastante. En medio de una región andina tan convulsionada, nuestro país sigue siendo el aliado principal de Washington para sacar adelante su estrategia, en especial frente a Venezuela.
Aunque Biden trajo cambios importantes, como la atención a la pandemia en su país y el compromiso para enfrentar el calentamiento global, Estados Unidos atraviesa por serias dificultades geopolíticas y económicas. En estos campos, necesita contener el avance de China en el continente, que ha sido enorme en lo corrido de este siglo. Ha incrementado de manera considerable sus proyectos y préstamos para infraestructura y otras inversiones de magnitud en la región.
Por ello, antes de llegar a Colombia, durante su paso por Ecuador, Blinken expresó que su país “no pide que elijan entre Estados Unidos y China”, pero sí un mayor escrutinio sobre las inversiones chinas en áreas sensibles. Eso sí, se cuidó de enfatizar que la preocupación principal no era por los negocios sino por el riesgo de que “la creciente presencia de Pekín en Latinoamérica derive en un aumento del autoritarismo a largo plazo”. Es decir, el viejo discurso de que se trata de defender la democracia.
En la visita de Blinken a Colombia sucedió lo que ocurre rutinariamente en estas visitas en que los altos funcionarios del imperio vienen a supervisar sus territorios de dominio. Se abordaron de manera general diversos asuntos bilaterales y regionales, correspondientes a la agenda de Estados Unidos en esta parte del continente: la migración, el narcotráfico, la seguridad, la democracia, la libertad y el progreso social.
Adicionalmente, Blinken dirigió la Conferencia Ministerial sobre Migración, que congregó a los ministros de Relaciones Exteriores de las Américas para abordar temas como la crisis de migración irregular que afecta a la región. Asimismo, participó en la novena edición del Diálogo de Alto Nivel entre Estados Unidos y Colombia, en el que se abordaron los mismos temas generales referidos.
Sin embargo, esta monotonía se vio afectada por dos hechos que se presentaron un día antes de la llegada del secretario de Estado a Colombia, cuando Duque se encontraba en Brasil, supuestamente adoptando medidas contra el cambio climático con Bolsonaro. Estos hechos perturbaron notoriamente la tranquilidad del presidente y la vicepresidenta-canciller y provocaron su respuesta airada.
El primero fue una carta enviada al secretario de Estado por José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch, quien ha estado muy al tanto y ha sido muy crítico de la situación colombiana. En esa carta le pide a Blinken que aproveche su visita para presionar por la situación de los derechos humanos, que se deteriora de manera peligrosa, y que condene los abusos policiales vividos durante el reciente paro nacional.
A pesar de la respuesta fuerte de Duque, minimizando el contenido de la carta y calificándola de oportunista, el secretario de Estado insistió abiertamente en la necesidad de que su gobierno se comprometiera con la paz de manera integral, con la defensa de los derechos humanos y con la garantía de la protesta social en el país. Con ello hizo eco a las voces de los congresistas demócratas que desde su país se expresan con insistencia en contra de los abusos que se cometen en Colombia.
El segundo hecho que exacerbó a Duque fue la propuesta aprobada por unanimidad en el Congreso de Colombia para crear una comisión bilateral interparlamentaria que trabaje por la normalización de las relaciones diplomáticas con Venezuela. Esta propuesta, cuya iniciativa fue de los senadores Yezid García y Jorge Guevara, recibió la respuesta positiva inmediata del gobierno de Venezuela y de la Asamblea Nacional de ese país.
Es una propuesta tan sensata, que fue respaldada por todos los congresistas, por encima de sus diferencias políticas. Pero Duque respondió nuevamente, en tono enfático, que nunca reconocería a la dictadura de Venezuela.
No hay duda de que el desprestigio de Duque y su aislamiento internacional seguirán primando durante los meses que le quedan a su gobierno.
La acción parlamentaria de Yezid García en el Senado
Senado colombiano aprueba normalizar relaciones con Venezuela
Iniciativa de los Senadores Jorge Guevara y Yezid García desenmascara perjudicial y agresiva política progringa de Duque contra Venezuela
Gran desorden en el ámbito político ha causado la aprobación por unanimidad de la proposición presentada a la plenaria por los senadores Yezid García y Jorge Guevara en donde se propone la creación de “una comisión bilateral entre los parlamentos de la república de Colombia y la República Bolivariana de Venezuela” para trabajar de manera conjunta en tres asuntos: 1. Normalización de las relaciones diplomáticas; 2. Normalización de las relaciones comerciales. y 3. Verificación de las buenas prácticas comerciales entre nuestros países.
Ante el asedio de los medios, el senador García ha explicado el espíritu de la proposición “no es más que interpretar la situación y el sufrimiento de los colombianos que están en la frontera, de los pequeños y medianos industriales que perdieron un mercado”, y aclaró que no se trata de suplantar las funciones del presidente Duque. Igualmente reivindicó el derecho del Senado de opinar y coadyuvar hacia la normalización de las relaciones diplomáticas, necesarias entre dos naciones con miles de kilómetros de frontera. “Tenemos demasiados problemas comunes en medio de una crisis mundial” para no tener ninguna relación entre dos naciones tradicionalmente hermanas, “esta actitud ha perjudicado a los más vulnerables”.
Una vez aprobada la iniciativa, el presidente del Senado, Juan Diego Gómez la radicó ante la Asamblea Nacional Bolivariana y manifestó: “Creo que esto puede ser un avance….es un asunto que no tiene ideología política, es un asunto comercial entre dos países de frontera”. En carta de respuesta de Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional Venezolana afirmó “estar en plena disposición de iniciar el proceso expresado”.
El presidente Duque no pudo ocultar su disgusto con la proposición aprobada pues representa un duro tropiezo a su posición, más en el momento que recibía a Antony Blinken, Secretario de Estado de los EE.UU, nación con la que comparte una política de cerco y aislamiento al gobierno venezolano. En la rueda de prensa con el visitante le tocó referirse al asunto, manifestando que no reconocerá a una “dictadura oprobiosa”, respuesta que reafirma “todo lo de él, es intransigente y arrogante”, señaló el senador García.
La bancada del Centro Democrático en comunicado solo atinó a expresar su reconocimiento a la política de Duque frente a Venezuela y al gobierno interino de Guaidó sin dar explicación alguna de su voto afirmativo a la proposición.
No al presupuesto que recorta la inversión social
Repitiendo la antidemocrática jugadita de dejar para el último día la aprobación del presupuesto general de la nación, de nuevo, a pupitrazo limpio, se impuso el proyecto del gobierno sin estudiar los urgentes llamados de las bancadas de oposición para incluir rubros para paliar, así sea en mínima medida, las angustias del grueso de la población. Además, a la ley de presupuesto le colgaron el orangután de la suspensión de la ley de garantías, que impide firmar contratos públicos en los meses previos a las elecciones. Sin duda la Corte Constitucional declarará inconstitucional el artículo, pero ojalá no sea cuando ya se haya aceitado la maquinaria oficialista.
El Papa recibe a los trabajadores colombianos
Por Alberto Herrera. Una importante delegación conformada por directivos de la CUT emprendió desde esta semana una gira por el continente europeo para dar a conocer la lucha que los trabajadores y amplios sectores sociales han librado en Colombia por la paz, los derechos humanos y el trabajo decente.
Los sindicatos colombianos, que son conocidos por las valerosas y justas luchas libradas y gozan de un reconocimiento mundial, serán recibidos por la Confederación Sindical Internacional, CSI, organización que aglutina al sindicalismo mundial. Lo mismo está programado con las confederaciones de España, Bélgica, Italia, Suiza y Países Bajos. Igualmente se reunirán con europarlamentarios, partidos políticos y organizaciones sociales, y se adelantarán ruedas de prensa en cada una de sus paradas.
En Ginebra se llevarán a cabo dos importantes reuniones, una con Guy Ryder director de la OIT y con Michel Bachelet, alta comisionada de la ONU de los DDHH y el representante de la Unión Europea en Colombia Eamon Gilmore.
El 27 de octubre en su estadía en Roma tendrán un encuentro con el papa Francisco quien ha mostrado su interés por conocer de parte de los trabajadores la situación que vive Colombia.
El regreso a Colombia será el 5 de noviembre. Desde este espacio La Bagatela considera de la mayor importancia esta gira y estará informando su resultado.